martes, 11 de diciembre de 2007

Nadia Comăneci y la Educación...

Al despertar el domingo, por acto reflejo, encendí el televisor y daban una película de unas gimnastas... Como siempre me ha gustado la gimnasia olímpica (barras, argollas, etc) me quedé viéndola un rato...

Parte de la trama, consiste en una rebelión de las gimnastas a partir de la decisión de los jueces de castigar una rutina bastante compleja, porque a la muchacha en cuestión, se le vio el tirante del sostén, así que en vez de los 10 puntos, se le dieron sólo 9,5... Por supuesto el entrenador montó en cólera y partió a reclamarle a los jueces, quienes se mantuvieron inflexibles y, las compañeras de la gimnasta, deciden boicotear el resto de la competencia, eligiendo ellas a la ganadora y auto-descalificándose el resto...

La película (Stick It, traducida como "Pisando Firme") contrasta completamente con otra película (cuyo nombre no recuerdo, posiblemente documental) respecto de los juegos olímpicos de Montreal en 1976, cuando la rumana Nadia Comăneci luego de una actuación verdaderamente brillante está a la nerviosa espera del resultado y, luego de una pausa dramática (vamos, que se justificaba) aparece la puntuación: 1,00. Por supuesto nadie podía entender puntuación tan baja... todos choqueados mirando sin entender, los comentaristas atónitos... Hasta que llega la explicación: Nadia había obtenido 10 puntos, es decir la puntuación perfecta que nadie antes había conseguido. Y como no era costumbre, simplemente el marcador electrónico NO era capaz de presentar ese número (un dígito significativo y dos para decimales).

Contrasta, porque nadie habría osado ir a reclamarle a los jueces. De hecho, la información correcta sólo se informó cuando los jueces se dieron cuenta que ese NO era el puntaje que ellos habían colocado...

Contrasta, porque la perfección (10 puntos) siempre se había entendido como inalcanzable. Los mejores atletas obtenían 9,99 puntos. Siempre había un juez que había observado algo mejorable.

El mundo de la gimnasia cambió radicalmente el año de 1976. Desde entonces, se considera "razonable" que los gimnastas obtengan 10 puntos y si no los obtienen, consideran válido ir a preguntar el porque...

No puedo dejar, ahora que finaliza el semestre y he estado colocando notas, de pensar en mis alumnos... Pasa que soy de los profesores "mala clase", de esos que muy rara vez pone un 7.0 (ni siquiera a mi mismo) pues soy un crítico que cree que uno siempre debe mejorar.

Y no puedo entender como un alumno que llega y baja un texto de wikipedia, para presentarlo como propio, reclama porque no le colocaron el 7.0

No culpo a doña Nadia de lo que ocurre.. Pero claramente su actuación en Montreal en 1976, reconfiguró el mundo para quienes tenemos que evaluar a otros...

2 comentarios:

LiRio dijo...

que es mas complejo ?

evaluar o ser evaluado?


Bso.

jms dijo...

da para darle otra vuelta... quizá para otro engranaje :-)